La belleza de la Catedral de San Agustín es innegable, pero la actual iglesia de San Agustín fue erigida en 1872 y nunca fue diseñada para ser una catedral en funcionamiento ni la iglesia madre de una diócesis completa. El proyecto de la campaña Catedral de San Agustín: Nuestra Historia, Nuestra Fe, Nuestra Catedral reconfiguró la iglesia existente para convertirla en una catedral plenamente funcional para el pueblo de los siete condados que comprenden la Diócesis de Laredo. Nuestra Cathedra existente, la silla del obispo, fue reemplazada por una más digna y que refleja el esplendor y la belleza de la Catedral. El altar existente fue ampliado para acomodar a más de nuestros sacerdotes en las celebraciones diocesanas, y se renovó la sala de vestimenta.